15 de septiembre de 2008

Adiós abuela hasta siempre, te quiero.


Escribo este articulo hoy ya que en su día no tuve palabras para continuarlo hoy lo continuo como si fuera el día 9 de septiembre.

Hoy día especialmente triste para mí y mi familia hoy nos ha dejado la mujer más importante de nuestras vidas, la mujer que vio crecer de su matrimonio 10 hijos, 36 nietos y 51 biznietos, hoy nos ha dejado mi abuela, no tengo palabras para describir lo que siento, tengo un nudo en la garganta y los ojos nublados por las lágrimas, además me corroe por dentro el no poder ir a su entierro por que Marta está a punto de hacerme padre y hago más falta aquí que allí. Mi abuela era, es y será una mujer excepcional, aunque todo el mundo crea eso de su abuela pero en este caso es la pura verdad, era una mujer capaz de sacar adelante una familia, aguanto carros y carretas, ha vivido una guerra y en algunos momentos seguro que no lo ha pasado del todo bien por muchísimas razones. A mi me queda el consuelo de haber vivido con ella muchos días de mi vida, aunque no fueron tantos como yo hubiera deseado, ya que ella vivía en Jaén y yo en Barcelona, casi todos los veranos, sobretodo cuando era pequeño, los pasaba en su casa con mis padres, tíos y primos a los que quiero un montón y a los que no nombro porque seguro que me dejo a más de uno. No tengo más que buenos recuerdos de ella, me ha regañado mil y una vez y me ha dado miles de besos cuando me veía o se despedía, ya sabéis esos típicos besos sonoros he interminables de abuela, no puedo estar allí para despedirte, pero como se suele decir las cosas hay que hacerlas en vida y creo que el cariño que me diste en vida no voy a olvidarlo nunca, como tampoco olvidaré el tacto de tus manos arrugadas y curtidas por el paso de los años creando un mapa de experiencias, tus miradas tiernas llenas de sinceridad y amor incondicional como olvidar tu voz rota por los años y todas la lecciones que me enseñaste a través de mi madre y que yo pasaré a mi hija. No se que más puedo decir era una mujer que se dejaba querer como ninguna con una ternura fuera de lo común y que disfrutaba viendo a su familia unida, como en las bodas o para su cumpleaños que fue el día 1 de septiembre hizo 93.

Adiós abuela, te quiero muchisímo.

2 comentarios:

Anónimo dijo...

Lo siento tio. Es una putada perder a un ser querido. Yo a los 12 años perdi a mi padre pero con la ayuda de la familia y los amigos se puede ir superando (pero no olvidando). Lo mejor en estos momentos es que te apoyes en tus seres mas queridos.

Ademas yo tengo la suerte de vivir bajo el mismo techo mi madre y mi abuela, y aunque muchos dias me de la vara y discutamos, me gusta en el fondo vivir con ella y pensar en la vida tan mala que llevo, su madre murio al nacer ella y luego su padre se caso con otra y se crio en casa de unos tios. Aparte de quedarse viuda con 30 años y 3 niños pequeños(si familia de viudas por desgracia XD).

Nuestras abuelas si que lo han pasado mal en su vida y nunca les ha faltado una sonrisa, un consejo que dar o su impagable compañia.

P.D me gusto mucho tu articulo, y ya sabes que estoy aqui por si necesitas hablar o algo :)

Lluís López dijo...

Hola OCB, sabia que vivias sola con tu madre pero no el porque, tiene que ser muy duro para una madre tirar una casa adelante con 3 criaturas pequeñas, admiro a la gente como tu madre, no me extraña que la quieras tanto.
Lo de mi abuelita al fin y al cabo es ley de vida pero uno nunca está preparado para recibir a la muerte, aunque tengamos toda la vida para asimilarlo es una situación a la que nunca me acostumbro y cada vez toca más cerca, no se si me explico. Muchos besos para ti los tuyos y abrazos para Santo.