Los "informer" no son el problema

Hace un par de semanas, cuatro estudiantes de la Universidad Autònoma de Barcelona crearon una página de Facebook, la intención era ofrecer un espacio para que los estudiantes de al universidad pudieran conocerse, quedar, enviar un mensaje de forma anónima o enviar un cotilleo/rumor, a esta página la llamaron El Informer de la UAB. En el apartado información de esta página de Facebook pone lo siguiente:

¿Tienes algo que decirle a alguien de la UAB?

¡Envíale tu mensaje al Informer y él se encargará de publicarlo

de una forma completamente anónima!

El sistema se ha extendido tanto, y se ha hecho tan famoso, que hay informer de muchos colegios, de barrios e incluso ciudades enteras. Hasta aquí todo es bastante normal, unas chicas hacen caso de las instituciones y han sido creativas y emprendedoras, por eso han montado esta página de "contactos y cotilleos" de una forma muy inocente.

El problema viene cuando se combinan rumores, anonimato y, por qué no decirlo, algo de mala leche. De esta amalgama, por muy buenas y puras que fueran las intenciones de nuestras jóvenes emprendedoras, no puede salir nada bueno y mucho menos si a este cóctel le añadimos menores de edad. En algunos informer se han publicado mensajes que pasan la linea roja de la broma y del cotilleo y pasan al terreno del acoso o ciberacoso.

Como era de esperar, ya han habido las primeras denuncias por informaciones aparecidas en los informers. Pero esto no es nada nuevo, el problema no son los informers, ni Facebook... el problema es la educación y los valores que tienen los niños. Acoso ha habido y habrá, por desgracia, mientras haya niños que se relacionen y no  existan mecanismos eficaces y necesarios para combatir el comportamiento y las acciones delictivas realizadas por niños y adolescentes.

Estamos hartos de ver como niños o chavales con 17 años son juzgados por delitos graves, como acoso hasta tal punto hacer que el acosado se suicide, asesinatos, violaciones y todo tipo de fechorías, a sabiendas que la ley les protege por no ser mayores de edad, aunque solo sea por horas, como pasó en el asesinato de la Vila Olímpica de Barcelona. Pero ya sabemos que la justicia y los que crean las leyes (políticos) en España dejan mucho que desear.

A raíz de estos informers y sus posteriores problemas, resurgen de nuevo varias incógnitas o debates, que aparecieron a la par que Internet y que se acrecentaron con la evolución 2.0 de la world wide web y mucho más con la creación de las redes sociales. Una de ellas es el anonimato en la red y la otra es la utilización  de la web por parte de menores de edad, pero estos debates se merecen ser analizado en profundidad en un artículo a parte.